lunes, 25 de diciembre de 2017

LA TRAMPA

Este relato ganó una mención especial en el concurso  "Embrujados II"
organizado por el blog español "Tu concurso Literario", 
en el mes de noviembre


El tropel de ratones embrujados persigue una música. Esos sonidos bonitos y armoniosos que los subyugan y les hacen creer que les dicen lo que desean escuchar. Así, en montón, en fila india, como sea, siguen adelante, creyendo que están avanzando.
Los convencieron de huir del felino gigante que estaba presto a devorarlos. ¡Pobres y tontos ratones ciegos! Nunca fue real, el gato sólo existió en el imaginario colectivo que otros supieron construirles. No perciben, ni olfatean la trampa hacia la que los conducen, inermes y mansos.
A veces, alguno se atreve a cuestionar el rumbo que llevan, las reacciones no tardan en manifestarse: "¡Es un agente del gato!". "¡Quiere confundirnos!". "¡Pretende desviarnos del paraíso sin felinos prometido " y en medio de un frenesí casi diabólico, simplemente terminan por devorar al "subversivo", no sea cosa que terminen contagiándose con ideas ajenas a su identidad ratonil.
Cuando al final del recorrido, sus patas tocan el metal de la enorme jaula en la que los están encerrando, deciden no dar crédito a sus sentidos: "Así debe ser la puerta de entrada al paraíso de los ratones".
Imposible e inútil tratar de convencerlos del engaño. Adoran el azúcar de una dulce mentira.



 © Mirta Mineo - Todos los derechos reservados - Inscripto en el Registro Nacional de la Propiedad Intelectual

4 comentarios:

  1. Mis humildes Felicitaciones. ¡¡¡ Muy actual !!! Ariana Ani

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    1. Muchas gracias!!!!! Sí es como vos decís, muy actual

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  2. Hay valores y, por contra, ofuscaciones que acompañarán al individuo mientras la tierra gire. Muy bueno, Mirta.

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    1. Es tal cual lo dices, Tina! Gracias por tu comentario!

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