domingo, 20 de noviembre de 2016

EL INFORME

Les presento este cuento que ha ganado el 4to Premio en narrativa en el Concurso Internacional "Letras Vivas 2016" organizado por el Grupo de Escritores Argentinos.

De: Ministerio del Interior
A: Sr. Primer Ministro
Asunto: Resultado operativo fuerzas conjuntas
Carácter del Informe: SECRETO

Elevo a Usted el presente informe con el propósito de poner en su conocimiento los detalles pertinentes al operativo relacionado a la destrucción del cargamento de drogas incautado el mes pasado y cuyo resultado se ha revelado completamente exitoso.

Como estaba previsto, efectivos de la guardia nacional, gendarmería y prefectura, en una acción conjunta, han procedido a incinerar tres (3) toneladas de marihuana, dos (2) toneladas de opio y una (1) tonelada de pastillas de éxtasis.

Dicho operativo ha sido efectuado el domingo próximo pasado en el parque central de la capital con la excusa de que la población, que así lo deseara, fuese testigo del hecho.

La imprevista aparición de un centro anticiclónico que se fue desplazando en la periferia de la ciudad, dio origen a la formación de fuertes vientos rotativos que causaron que la totalidad de la población resultara afectada por el humo proveniente del operativo.

Como consecuencia de dicho evento meteorológico se han contabilizado:
1587 accidentes automovilísticos  de diversa gravedad sin que se hubieran provocado víctimas fatales.
4827 personas afectadas con alucinaciones de diferentes grados.
95 ciudadanos encontrados caminando por las cornisas de sus edificios y que fueron rescatadas por el cuerpo de bomberos en inusitados actos de arrojo ya que, al estar ellos también afectados por el humo, no estaban plenamente conscientes de sus actos.

Además, todas las personas que se dirigieron a los centros hospitalarios quejándose de síntomas diversos, tales como: depresión súbita profunda, euforia entusiasta inusitada e incluso deseo incontrolable de asesinar a algún miembro de su familia, han sido tratados con resultado dispar puesto que los médicos tampoco estaban en su sano juicio, no obstante, no se han iniciado causas por mala praxis ya que todos los pacientes han olvidado lo ocurrido.
Cabe destacar que esta circunstancia meteorológica fortuita ha incidido favorablemente en el resultado de los operativos llevados a cabo en los domicilios señalados como ocupados por los más fervientes activistas opositores a nuestro gobierno.

Todos ellos han sido trasladados a nuestro nuevo Centro Secreto de Detención, situado en el norte del país, sin que hubieran ejercido resistencia alguna, ni se hubieran levantado sospechas entre los vecinos. Tampoco se han efectuado denuncias de desaparición de personas ya que simplemente nadie recuerda su existencia.
Es por esto que podemos concluir que las pruebas de la droga RU5853-KL, más conocida como la “píldora del olvido”, han sido totalmente positivas.
El hecho de haberlas disuelto en la red de distribución de agua de la ciudad ha redundado en el fácil acceso a toda la población. Cada píldora llega a afectar a unas mil (1000) personas con lo cual se deduce que el costo-beneficio es realmente importante.

Por todo lo actuado podemos afirmar, sin ninguna duda, que la continuidad a perpetuidad de nuestro gobierno está plenamente garantizada.

Basta con diluir la cantidad necesaria y suficiente de RU5853-KL en el circuito de agua corriente desde dos (2) días anteriores a las detenciones previstas, para provocar en todos los habitantes el olvido específico concerniente a los operativos realizados y a las personas involucradas.

Sin otro particular, lo saluda MGQ Primer Ministro.


© Mirta Mineo - Todos los derechos reservados - Inscripto en el Registro Nacional de la Propiedad Intelectual

Este cuento fue inspirado por una noticia real, de un suceso ocurrido en Indonesia en 2015, en el que las autoridades quemaron un cargamento de drogas y el viento giró hacia la ciudad, cuya población sufrió las consecuencias


miércoles, 16 de noviembre de 2016

BIEN MERECIDO

Nunca pensé que esconder un cadáver fuera tan difícil. En realidad tampoco había pensado matar a alguien. Pero ahora estoy aquí, con su cuerpo a mis pies. Inútil pensar en llamar a alguien que me ayude, no se puede confiar en nadie para un asunto tan delicado. 
Tengo la consciencia tranquila. Se lo merecía por canalla, por traidor, por miserable. Como tanto insistió en mantener nuestra relación oculta, nadie sabe de esta casa que escondía nuestros encuentros. 
Lástima, si lo hubiera planificado, le habría propuesto ir a pasar el fin de semana a una cabaña solitaria en la montaña. Allí la resolución del problema hubiera sido más fácil. 
Quizás lo mejor sea el cuchillo eléctrico. Espero que sea lo suficientemente fuerte. Y sería una pequeña venganza usarlo, él sabía bien que para mi cumpleaños, o para las fiestas, quiero regalos personales. Nada de electrodomésticos que son para la casa. Pero no tuvo mejor idea que en esta ocasión traerme como gran cosa, el último modelo de cuchillo eléctrico. ¿Y para qué? Para ahorrar comprando la carne en el mayorista y que yo me ocupara de cortarla.


Al final, el cuchillo demostró ser bastante útil, aunque para la cabeza, también tuve que usar el hacha de cortar leña que enterraré en el jardín. 
Los trozos quedaron de tamaño bastante manuable y las bolsas para congelar permiten un transporte seguro, sin dejar sospechosas manchas de sangre. 
Afortunadamente, en casa tengo bastante lugar en el freezer grande, ése que también me regaló para la última Navidad. Después podré deshacerme de los paquetes de a poco, sin levantar sospechas y, sobre todo, sin dejar rastros. 
Otra cosa que nunca imaginé, es que mi trabajo me fuera a resultar tan útil. Ser la veterinaria en jefe del sector de grandes felinos del santuario de animales más grande del país, tiene sus ventajas: mis animales van a disfrutar mucho los "caramelos especiales" que voy a llevarles en estos días.


© Mirta Mineo - Todos los derechos reservados - Inscripto en el Registro Nacional de la Propiedad Intelectual

sábado, 12 de noviembre de 2016

MISTERIO INSONDABLE

¿Por qué las medias, que nacen mellizas, puesto que a nadie se le ocurre fabricarlas en un número distinto de dos, tienen esa extraña costumbre de quedar huérfanas de su pareja ¿o se dirá viudas de su gemela?
En todo caso es un misterio que trasciende las fronteras y deja el siguiente interrogante: ¿adónde va a parar las medias perdidas?
Es evidente que estas estrambóticas desapariciones son fruto de la vida moderna y de su ritmo enloquecedor que obliga a la gente a hacer todo a las apuradas y confiar demasiado en las máquinas.
Antes, cuando las medias se lavaban a mano, se lo hacía siempre por pares ¿a quién se le hubiera ocurrido la peregrina y desordenada idea de enjabonar una media azul con otra roja? Esa herejía no pasaba por la cabeza de ningún ser humano que se preciara de tal. Luego cada media era prolijamente colgada de la soga del patio, al lado de su hermana, para estrechar lazos familiares y disfrutar juntas del sol. Una vez secas, se procedía al ritual ancestral de estirarlas una encima de la otra y comenzar a enrollarlas, a ambas a la vez, desde la punta del pie hasta el puño. Cuando este rollo estaba bien logrado, sólo quedaba abrir el puño de un miembro del par y como por arte de magia, envolver ambas medias que quedaban protegidas en esa especie de nido acogedor, del que era imposible que uno de los componentes de la pareja se escapara para ir a recorrer el mundo. Finalmente se las acomodaba a todas en el mismo cajón en el que ya no corrían ningún riesgo. El único peligro se ponía en evidencia en el momento de abrir el cajón pues entonces, como impelidas por un ansia insaciable de libertad, podía suceder que alguna de esas especies de esferas “mediales” saliera volando por las aires para esconderse en alguno de los intrincados e inaccesibles laberintos que se forman bajo la cama en estos casos, particularmente si uno está verdaderamente apurado; es en ese instante fatal en que hacía su aparición el perro de la casa, el que se mostraba como un experto cazador lanzándose bajo el mueble cual flecha a la pesca de su presa, para salir a toda velocidad con el trofeo en la boca e ir a destrozarlo alegremente en medio del patio. Por suerte estos trágicos hechos no sucedían con demasiada frecuencia y la mayoría de las veces la gente lograba salir de su casa a horario con las medias apropiadas correctamente puestas.
Esto cambió abruptamente con el arribo de la tecnología a los hogares y las medias comenzaron a caer a granel dentro de los toneles de los lava y/o secarropas que deben tener una salida secreta por la que se escapa alguna de estas rebeldes. De otro modo ¿cómo se explica que se coloquen todas las medias en la máquina, junto con las otras prendas y al terminar el lavado o el secado sistemáticamente falte al menos una que se empecina en seguir desaparecida? y por más que se revisen todos los vericuetos de los aparatos, todos los pliegues de las demás prendas, la media continúa perdida. Y en el supuesto caso que por algún extraño milagro logren salir todos los pares completos, como ahora simplemente se arrollan en forma descuidada, desaparece alguna de adentro del cajón sin dejar rastros.
Es evidente que este problema se verifica a nivel mundial, ya que los arquitectos diseñadores de muebles se jactan de hacer divisiones especiales para las medias e impedir las desapariciones subrepticias. Pero por más que se gaste en estos dispositivos, en la realidad, el resultado es más que paupérrimo y la gente continúa guardando las medias solitarias en una bolsa separada, con el secreto anhelo de recuperar algún día a las hijas pródigas. 

© Mirta Mineo - Todos los derechos reservados - Inscripto en el Registro Nacional de la Propiedad Intelectual